Elegir unas buenas gafas de sol es imprescindible para nuestros ojos
El uso de gafas de sol inadecuadas incrementa en un 20% el número de lesiones oculares provocadas por el sol. La radiación solar está compuesta por ondas visibles e invisibles; mientras las primeras sólo resultan dañinas si se expone muy intensamente a ellas, las segundas están compuestas por radiaciones infrarrojas y rayos ultravioletas. Si tenemos en cuenta que los ojos son veinte veces más sensibles que la piel a la influencia de dichos rayos, es de vital importancia proteger nuestra vista con gafas que tengan el grado de filtración necesario. Para ello, los profesionales recomiendan comprar gafas homologadas con el sello CE y elegir el filtro adecuado en función de la situación en la que vayamos a utilizar las gafas. Actualmente existen 5 categorías de filtros de acuerdo al grado de absorción de luz ultravioleta. Las gafas deben absorber entre el 99-100 % de UV.
Las lentes deben ser orgánicas o minerales, nunca de plástico. Y mucho cuidado con los niños, dado que en esta etapa, el cristalino no se encuentra plenamente desarrollado y no puede filtrar toda la luz ultravioleta.
Está científicamente demostrado que un buen uso de unas gafas de sol puede prevenirnos de enfermedades tales como, Cataratas, Degeneración Macular ( DMAE ) , Desprendimentos de Retina, etc.